¿Que es el Arte?

La deformación del concepto de Arte

¿Qué definimos por arte?

Antes que nada, vamos a definir etimológicamente el significado de la palabra “Arte”. Según el diccionario 2005 Espasa Calpe, el arte “es el acto mediante el cual el hombre imita o expresa lo material o lo invisible, valiéndose de la materia, de la imagen o del sonido, y crea copiando o imaginando. / Conjunto de obras, estilos o movimientos artísticos de un país, una época, etc.”.
 
El concepto de Arte según el común de la gente suele ser de lo más variado. Para tener nociones más exactas o fidedignas sobre la misma; analizar la historia y el recurrir al tiempo, nos ayudara sobremanera.

¿Por qué recurrir al tiempo y a la historia?. Al tiempo; porque determinados episodios en el mismo, ejerce influencia sobre las artes. Y en esto; no solo se incluyen las artes plásticas, sino también la música, la filosofía, etc. A la historia, porque sin ella no habría arte propiamente dicha. El arte deriva siempre de diversos periodos históricos; por ende de diversas civilizaciones, pueblos, costumbres, etc.

El Arte en si mismo es un raigambre de tradiciones propias de un pueblo o lugar. Tiene su raíz en un núcleo de tradiciones ancestrales, lo cual lo liga a un fuerte carácter de origen local.

Ejemplo de ello es el arte autóctono que podemos ver a día de hoy en la provincia de Salta o Jujuy (norte de Argentina); arte que nos remite a tiempos lejanos, tiempos donde el aborigen habitaba a sus anchas en esas tierras. Una vasija cerámica con decoraciones, un colorido poncho de alpaca, un brebaje fermentado hecho a base de maíz; son algunas de las claras manifestaciones culturales que forman parte del arte propio de un pueblo.

En un puesto callejero de Jujuy podremos apreciar lo que es realmente arte,

mas que en un lujoso salon de arte moderno

¡Y claro que esto es arte!, cuan bueno y laborioso es un pueblo en mantener su escencia y su grandeza, a través del cuidado de sus tradiciones y costumbres. ¡Cuanto deberíamos aprender de los pueblos antiguos que cuidan con recelo y orgullo sus tradiciones!. ¡Cuan admirable es observar en la actualidad como muchos de estos pueblitos olvidados en el tiempo, aun conservan con orgullo, el “Arte” heredado de sus ancestros!

De aquí nace el Arte, lo que es realmente el arte en su escencia; una manera de conocernos a si mismos y a lo que nos rodea en un entorno cultural y de idiosincrasia propio. Esa es la forma natural que tenemos para estudiar o entender lo que una determinada cultura pensaba o sentía; porque el arte es una expresión propia del alma que la cultiva.

La modernidad y sus expresiones artísticas

Sin embargo; la modernidad – en la actualidad, con su cargado andamiaje progre -, ha derivado la palabra “Arte” en una serie de calamidades dignas de una mente psicótica.

¡Y esto no es nada nuevo!, de ninguna manera; de hecho, esta perversión y esta trastocada visión de la realidad (hecha adrede o no;  – en mi punto de vista adrede, ya que una manifestación propia de una minoría siempre es tendenciosa; entenderán porque en otra publicación), data de muchas décadas atrás.

Tal vez los primeros síntomas de esta corrupción, data de las primeras expresiones artísticas que se dieron a llamar por el nombre de Dadaísmo, Cubismo y Surrealismo, (estas concepciones serán debidamente analizadas y estudiadas en una próxima publicación).

Lo absurdo y estupido encarnado

en esta “obra de arte”

Lo grotesco, lo absurdo y lo irreal se hizo palpable en cada ocasión donde hubiera una galería de arte a principios y mediados del siglo XX.

“El movimiento dadaísta es un movimiento antiartístico, antiliterario y antipoético porque cuestiona la existencia del arte, la literatura y la poesía. - … El Dadaísmo se presenta como una ideología total, como una forma de vivir y como un rechazo absoluto de toda tradición o esquema anterior.”

(Citado de Wikipedia –Dadaísmo-)

Una sutil pero voraz influencia destructiva es evidente en el sentir de tales obras. Una manifiesta aversión contra todo bagaje cultural anidado desde siglos y con una clara connotación nihilista. Es un movimiento “anti” que rompe con todos los esquemas preconcebidos, - como un rechazo absoluto de toda tradición o esquema anterior – (tan claro que no hay nada que agregar).

 Tan solo quisiera citar que bajo de estas corrientes artísticas, hay un cierto paralelismo a los cambios que se dieron durante la época del Iluminismo, los cuales trazaron un quiebre sustancial en el pensamiento de la cultura occidental.

De hecho, mucho de lo que creemos “arte”; subyace dentro las mismas obras (pinturas), un elucubrado sentido que se deslinda mas allá de lo metafísico; desde lo onírico a lo netamente esotérico (sobre todo en obras artísticas mucho mas alejadas en el tiempo, como el arte renacentista o el barroco),  -obras y autores de los cuales ya detallaremos en alguna otra publicación, ya que hay mucho para ver y conocer -.

La actualidad, la globalización y el poder de los medios

En tiempos actuales, todo esta ligado a una homogénea masificación cultural mundial. En norma general, Internet sobre todo y los medios de comunicación (TV, radio, etc.), han conseguido unificar una base de criterios estrictamente lineales a una determinada línea de pensamiento. ¡Y vaya si lo lograron!. De hecho las valientes mentes pensantes y con criterio propio, están condenadas a ser objeto de burla y condena en cuanto se pronuncian a objetar su propio vislumbre en contraposición a lo políticamente establecido.

Todo esto tiene su razón y su porque; y la herramienta perfecta tiene un nombre y se llama: globalización. Más allá de las ventajas que ha traído esta “aldea global”, donde las comunicaciones y la tecnología ha jugado y sigue teniendo un papel preponderante; la globalización trae consigo unas consignas no tan halagueñas para el panorama mundial.

Acá podemos trillar largo y tendido sobre el tema, pero no es el tema central de la publicación. Lo que no se puede obviar es que la globalización ha calado profundo en la cultura global. Por ende el concepto homogéneo de toda concepción llamada hoy por hoy “Arte”, tiene aristas comunes y afines a todo mente; sea del lugar del globo que sea. De hecho, el Arte moderno es un claro objeto redituable y muchos invierten en dichas obras (cuanto más mamarrachesca sea, mas cotiza).

Apreciamos el “arte” que se encuentra en cualquier lujoso salón, con un “Martini” de por medio en la mano, sin saber siquiera que estamos viendo (ya que esto, también forma parte de la tilingeria propia de algunos imberbes); cuando en cualquier pueblo alejado de la ciudad podemos realmente encontrar verdadero arte.

Esta es la fiel representacion del arte,

“miramos sin saber lo que vemos”

 
Por su propia escencia, el arte de hoy ha sobrevivido a la tendencia que auguraron para su felicidad, los autores que delinearon su estilo a principio y mediados del siglo XX. La generalidad, hoy marca que el expresionismo, no tiene que seguir una lógica o seguir una tradición. El hecho material que se lo concibe como arte, esta ahí, para ser conceptualizado de acuerdo al ojo de quien lo ve y siguiendo su propio criterio (este basado en la lógica o en lo abstracto).

Pero el arte también tiene su rollo: oculto, encriptado; destinado a ser descifrado o para quedar en la nada mismo. Un ejemplo que he dado en este blog lo pueden ver en – enlace –.

Arte Dadaista

¿Les resulta familiar este simbolo?

A mi parecer, creo que ahi esta el problema, porque por lo general con el arte moderno, la gran mayoría de personas comunes como Ud. o como yo, ignoramos o no damos sentido a lo que vemos.

Hoy podemos apreciar “el arte moderno” por medio de revistas, televisión, e incluso exposiciones no mediáticas y de poco relieve a pocas cuadras de nuestros hogares (paseos de artes municipales, he incluso monumentos, etc.).

¡Seamos sinceros!, ¿Se puede descifrar un amalgama de materiales, amorfo estructuralmente; en algo discernible y apreciable al normal intelecto con solo mirarlo?

Mañana les mostrare algunos monumentos que existen en lugares públicos y que les hará arder la vista de horror. ¡Hasta la próxima!